TUVE UNA AMENAZA DE ABORTO: ANA VICTORIA BELTRAN

ANA VICTORIA BELTRÁN tuvo algunas complicaciones durante el inicio de su embarazo, y casi pierde a su primogénita, Laura Sofía.

La relación entre Ana Victoria Beltrán y su esposo, Leonardo Parra, va a toda velocidad. Hace dos años se conocieron en un evento en Guachetá (Cund.), del cual Ana era jurado. Hoy, la actriz recuerda entre risas: "A los pocos días estaba tan super desparchada que le hablé, y él me invitó a salir. Si hubiera esperado a que él me hablara, ahí estaría esperando, porque él es muy introvertido.

Rápidamente, se hicieron novios, y siguiendo el mismo patrón, decidieron ser esposos, pues en tan solo tres meses de relación Leonardo se motivo a dar el siguiente paso y proponerle matrimonio en una pedida de mano un poco atropellada.

"El me quería llevar a un sitio en La Calera, y le dañe el plan porque ese lugar no me gustaba.; era para comer pinchos y yo quería comer de verdad (risas). En otro restaurante me preguntó si quería casarme con él. le dije que si, y luego salí corriendo al baño para enviarle una foto del anillo a mi amiga".

Tres meses después, la actriz y el ingeniero mecánico llegaron al altar, y pasados casi dos años de haberse casado están esperando a Laura Sofía, que ya cumple cuatro meses de gestación, aunque su madre asegure que esa barriga parece como de siete.

¿Planearon el embarazo o los tomó por sorpresa?

"Lo planeamos. Dejé de planificar y fue de una. Creímos que me iba a demorar en quedar embarazada, pero eso fue al mes de haberlo planeado. Leo tiene un hijo de 8 años, llamado Juan. Le doy gracias a Dios porque mi bebé ya tiene un hermanito adorable, que está muy emocionado por la llegada de su hermana. Tenemos una bonita relación".

¿Soñaste con ser mamá, o el matrimonio te trajo el deseo?

"Siempre soñé con tener una familia: pensé que no me iba a casar, porque llevaba muchísimo tiempo sin tener en una relación. Pensaba: De aquí a que me case y tenga un hijo, pasará mucho tiempo. Tenia 36 años, y concebir un hijo era complicado, y si no se me daba,tendría perros y gatos. Pero conocí a Leo, duramos seis de novios; a los noventa días ya me había propuesto matrimonio. Cuando se tiene una relación, el tema es diferente porque la gracia de casarse es formar una familia, aunque muchos se casan solo por estar en pareja. Yo si soñaba con tener un hogar. Mi mamá me decía: Tienes que tener aunque sea un hijo, ¿cómo te vas a perder de eso?".

¿Cómo ha sido tu embarazo?

"Al principio estuve superenferma, me la pasaba en la clínica, no podía hacer ejercicio porque me prohibieron todo movimiento brusco y tuve que estar quieta durante un mes. Tuve una amenaza de aborto, porque tengo miomas (tumor benigno). Eso ya está controlado y todo está en orden. Hasta el momento, Laura mide 25 centímetros y pesa 340 gramos. Nuenca en mi vida he bajado de peso, aunque sí de volumen. Con el embarazo, en vez de subir, bajé como cinco kilos, y solo he subido libra desde entonces".

¿Cómo reaccionó tu esposo cuando supo del embarazo?

"cuando me enteré salí corriendo para donde mi mamá. En la noche no lo dejé ni llegar y le conté. se puso superfeliz porque él es muy emocional. Cuando ve las ecografías llora. Los pocos antojos que me han dado. él me los cumple. Leo viaja mucho por el trabajo, y la bebé se mueve más cuando él está y le habla. ¡es muy bonito! es muy chévere vivir el embarazo en pareja. Las mujeres que lo viven solas son unas duras; pero estar en el hogar y vivir esa experiencia es mucho mejor, y para los niños es muy importante".

¿Cómo escogieron el nombre?

"Él lo escogió, porque soy malísima para los nombres. Un día me dijo que le gustaba Laura Sofía, y cuando miré el significado, me sentí muy identificada: "victoriosa y sabia". Él tenia hasta un libro de nombres, pero no me gustaba ninguno (risas). Pero estuve de acurdo".

¿Qué has aprendido del embarazo?

"A pensar más en mí y en cuidarme. La vida, generalmente es levantarse, conseguir el sustento diario porque el dinero es una prioridad para vivir, pero uno deja que esas cosas pasen por encima de uno y de nuestro bienestar. Todos necesitamos dinero para vivir, pero la salud es más importante. A mí, por ejemplo, que tengo miomas, el dolor no me deja parar de la cama. Si no se aprende la lección la vida la repite de manera más ruda para que uno aprenda".

¿Cómo crees que reaccionarás cuando nazca?

"¡Voy a llorar mucho! Ahora soy mucho más chillona: lo relaciono con algunas escenas que hice en Padres e Hijos: cuando Daniela tuvo mellizos, a mí me pusieron unos bebés recién nacidos en la sala de parto. Recuerdo que cuando me los pasaron estaba tan metida en el cuento que lloraba".