HICE DE TODO PARA SOBREVIVIR.
Ana Victoria Beltrán, le contó a Tv y Novelas todo sobre su nueva vida, más allá del persona de Daniela.
Aunque a veces la canse, para muchos sigue siendo Daniela. La niña, la adolecente y la mujer que creció, se enamoró - para algunos más de la cuenta- y se convirtió en uno de los simbolos de la televisón colombiana, por su participación en Padres e Hijos.
Ana Victoria Beltrán volvió al horario estelar.Esta vez encarna a Martha, una malévola secretaria, en Cuando Vivas Conmigo, del Canal Caracol. Verla nuevamente actuar es abrir la puerta en la vida de uno de los personajes más polémicos y recordados de nuestra pantalla chica.
Tv y novelas habló con Ana Victoria y nos contó lo que ha tenido que hacer después de Daniela para sobrevivir: desde atender un restaurante hasta ayudar a vender libros a su mamá. La dura novela más allá de los sets de grabación.
"Este nuevo personaje me gusta mucho porque soy más mala que un verraco. Salgo en los últimos capítulos, porque me meten presa. vuelvo para declarar contra los malos. Fue muy chévere,, bonito"., dice sobre su reciente actuación.
Hace rato no aparecía en una producción grande, al punto que le es difícil recordar el tiempo que estuvo sin grabar. Su última participación importante fue en Tres Caínes , un producto de RCN para RCN televisión. Antes había hecho producciones unitarias, esas que muchos ven como trampolín para principiantes.
El REBUSQUE DIARIO:
Ana Victoria dice que conseguir papeles es complicado por la oferta y demanda. "La actuación está difícil, pero ahí vamos en la lucha, está duro porque hay pocos proyectos. Esta es una lucha del día a día. Yo soy actriz, me encanta actuar y es lo que quiero hacer. Siempre estoy a la espera de poder grabar , pero si se da bien y si no hay que rebuscarse", señala con sinceridad sobre su situacion laboral. Lo dice con los argumentos que le da la experiencia. Después de haber vivido 16 años como Daniela, de tener trabajo inestable y gozar del dulce sabor de la fama. Ana Victoria quedó en el olvido laboral.
Aunque las cámaras y los titulares la perseguían , las ofertas y los personajes no llegaban. Por eso la vimos en las noticias que la mostraban de mesera en un restaurante, promocionando los servicios de un SPA, acompañando a su mamá - la escritora Teresita Ramírez - en la ferua del libro de Bogotá o vendiendo zapatos importados a través de redes sociales.
Para sobrevivir , comer y pagar facturas ha hecho de todo lo que hace un colombiano normal que no tiene trabajo estable. "De todos los negocios que he tenido, ya no existe ninguno. A veces vendo ropa, diseño, hago accesorios, le ayudo a mi mamá. Consigo mercancía y la vendo entre mis amigos , cuando traía zapatos de silicona de México. Camello para rebuscarme". Dulce sin aspavientos ni complejos de estrella,
Hace algún tiempo trabaja de docente en Tayrovision, una academia de modelaje y actuación que funciona en Bogotá. Con ese grupo de profesionales hacen montajes pedagógicos. "Ahora mismo tenemos dos obras de teatro: Una sobre el aborto y otra acerca del maltrato a la mujer". Las presentamos en colegios explica.
En redes sociales comparte las actividades que realiza en la academia, donde quieren y valoran su trabajo. En ese espacio virtual, la gente le recuerda algunos capítulos de su vida: la aparición en Soho, su tiempo como profesora de teatro en colegios, el paso por el cine peruano o la participación en el reality la Granja.
A pesar de que muchos televidentes aún confunden los intensos amoríos de Daniela Franco, en Padres e Hijos, con la realidad de Ana Victoria Beltrán, su forma de hablar es más pausada y sis palabras más prudentes.
